viernes, 29 de octubre de 2010

Marbella, defiéndete



Ahora que se está desarrollando el juicio Malaya, considero que es un momento idóneo para volver a sacar esta poesía en la que le pido a Marbella que se defienda de todos los que vinieron a esquilmarla, con fuerza y con valentía. Esperemos que la justicia les haga pagar todo el daño que le hicieron a mi Ciudad.

Marbella, preciosa,
Levanta tu cara
Mirando hacia el cielo,
Piensa en las cosas
Que te hicieron,
Aquellos,
Que con su soberbia
Tu alma hirieron,
Tu corazón destrozaron
Y sus trozos, despreciados,
Pretendieron…,
Regalar al mundo,
Pero el mundo que te quiere,
Y que es tu amante infinito
Defendió tu nombre hermoso
Y rehecha cual un puzzle
A tus hijos, devolvió tus trozos
Unidos por el amor,
El amor,
Que a ti regala
Desde el fondo de su alma,
Y llena tu corazón.

Tu corazón es hermoso,
El que embellece tu alma,
El que fuerzas suficientes da
Para luchar en la vida,
Contra tus ingratos hijos
Que se han vendido…,
Al enemigo que miente,
Que miente y daña tu paisaje,
Con muros que te rodean
Desde tantos edificios,
Que han sido construidos
En su zonas señoriales,
Llamémosla escolares,
Zonas verdes o deportivas,
Han invadido tus lares
Con muros que impiden
Que tu brisa sea suave,
Cual la Marbella que vi
Cuándo el mundo vine yo,
Ya que inocente nací,
E inocente he de morir,
Pero antes….,
Defenderé tu figura,
Como una fiera implacable,
Contra tantos gobernantes
Que tu nombre han osado
Pisar…..,
Y con sus mentes impuras,
Estropear tu perfil,
Tu ambiente de pueblo,
Del pueblo dónde nací,
Y puesto que tu hija soy,
Una hija de tus entrañas,
Hasta el final he de seguir
Defendiendo mi Marbella,
De gobernantes de antes,
De gobernantes de ahora,
Y de todo gobernante
Que dañe más…,
Tu imagen bella.

Eres bella, eres hermosa,
Defiéndete de las cosas
Que te hacen los ingratos,
Los que han renunciado a amarte,
Porque se vendieron,
A mano de los traidores,
Defiéndete, ciudad mía,
Pues, para eso,
Eres fuerte y la…,.
MAS-BELLA



viernes, 22 de octubre de 2010

El silencio de mi mente



No me gusta mi silencio,
El silencio de mi mente
Que me habla y que me engaña,
Que quiere ser
Una nube…..,
Que mi alma empaña,
Para que nadie la vea,
Para que nadie la intuya,
Para encerrarla,
En las cárceles difusas
Del corazón oprimido
Por las rejas …,
Del silencio
Que se le impone a mi alma.

Silencio que mintiendo,
Y reprimiendo,
Con sus zarpas….,
Escudriñando mi mente,
Reprime mis movimientos
Quiere mandar en mi alma
Quiere mandar en mi cuerpo,
Quiere que vaya a su marcha
Quiere que sea su guía,
Su guía, pero no me sigue,
Siempre va a su albedrío,
Es libre de pensamientos,
Es libre de movimientos,
De movimientos que vuelan
Alrededor de mi alma,
Y a mi corazón, engañan.

Mi mente me está mintiendo
Desde que mi razón alcanza,
Llena de dudas mi vida,
Me encierra en sus telarañas,
Telarañas, que ...,
Va tejiendo,
Como si fuera una araña,
Con ellas atrapa sus victimas,
Como a la mosca inocente,
Que…,
Creyendo ver su sustento,
Se tropieza con la muerte;
Quiere llevarme a la muerte,
Y también el desconsuelo,
Del ser que se siente sólo,
¿Nadie ha de ver sus desvelos?,
Sola hasta el fin de sus días,
Nadie acompaña su duelo,
El duelo que mi alma siente,
Pero, al fin…,
Mi mente miente,
Con saña y alevosía



domingo, 17 de octubre de 2010

La verdad de la mirada



La mirada nunca miente,
Vale más que mil palabras,
Es la mirada del otro,
Te escudriña, te examina,
Va recorriendo tu cuerpo
Desde abajo para arriba,
Y te aprueba o te suspende,
Va mirando tu envoltura,
Cual si fuera cosa suya,
Si pudiera te robaba
Hasta tu aliento templado,
Te examina con dureza,
Con la dureza que siente
El que nunca ha conseguido
Engalanarse por fuera,
Ya que su corazón ingrato
Pone trabas a su mente,
Para que con su envoltura,
No atraiga otras miradas,
Que vean sus grandes galas,
Que no son sino los signos
De su cuerpo y de su envidia,
Que es el vicio de mi España,
El vicio que nos domina,
Y que manda en nuestros seres,
El que ordena nuestras mentes
Para que con su cordura,
Ordene nuestros pesares,
Ordene nuestras miradas,
Ordenes nuestras envidias,
Y al fin,
Ponga orden en nuestras vidas
Antes de llegar al final,
Al final que nos espera,
Al final que nos domina,
Que no podemos eludir,
Porque el alma es inmortal
Y el cuerpo es tierra pura,
Y a la tierra ha de volver,
Despreciando su envoltura,
Desnudo como nació,
Como nació y como muere,
El que nunca ha procurado
Ver el final con amor,
Ni con los bienes que el cielo
Le ha regalado, y que con desprecio,
Ha rechazado,
No merece otro destino,
Es el destino de todos,
Pero el que apreció
Los bienes que…,
El cielo le regaló,
Llega con paz a esa hora,
Plena su alma de ternura,
De amor hacia los demás,
Lo que ha visto por sus ojos,
Le ayudan a descansar,
Nunca sintió envidia por nada,
Nunca la sintió en su corazón
Ese vicio a tentarle no llegó,
Pues al fin, sabia lo que le esperaba,
Lo sabía sin temerle,
Cuándo sus ojos cerraron,
Y su cuerpo a sus orígenes volvió,
Su corazón descansó, y su alma,
Voló hacías las estrellas,
Con la luna y con el sol,
Y su mirada desde arriba,
Con su brillo…,
A todos maravilló.


domingo, 10 de octubre de 2010

¡Ozu con Marbella!



¡Ozu con Marbella,
Qué bonita es,
No he visto una cosa
Que se parezca a ella!.

¿Quién sería tan bueno
Para hacerla así?.
Parece que el cielo
Se ha mudado aquí.

Pues mire Vd. hombre,
Esta es mi ciudad,
La hizo el Creador
Con mucho cariño.

Con tanto cariño
Que buscó un rincón
Al sur de nuestra España,
Con su corazón.

En este rincón
Hizo esta ciudad,
Que tiene luna y sol,
Playa, y una montaña
Muy bella por cierto,
Que cuida el clima, su clima,
Para que no entren vientos,
Ni fríos, ni fuertes…,
Para que no sintamos el frío
Que siente el resto de España.

Su clima es divino,
No se lo han robado
Aquellos que vinieron
A llevarse todo,
Porque no pudieron.
El clima de aquí
No hay quien se lo lleve,
Porque es de mi tierra
Y los marbelleros
No consentiremos
Que de nuestras tierras
Se lleven, los que ya le he dicho,
Lo mejor que tenemos.

Y mire, así estamos,
Que aún no hemos encontrado
Quien embellezca nuestra ciudad,
Como estaba antes,
Que era muy bella,
Que se la han cargado
Con tanto cemento
Tanta construcción,
Que nos quita la brisa
Que del mar nos llegaba,
Y ahora no nos llega,
Porque nuestra brisa
No puede los edificios traspasar.
No es poca la historia
Aún le podía contar muchos más,
Pero tengo que irme,
Le tengo que dejar,
Si tuviera tiempo
Le podría contar mucho
De las cosas bellas
De nuestra ciudad.


miércoles, 6 de octubre de 2010

Hasta el cielo



Se puede llegar al cielo,
Se pueden pisar las nubes,
Se puede ser muy feliz,
Se puede amar de verdad.
De todas estas maneras,
El cielo con las manos
Se puede tocar y acariciar,
Porque la felicidad,
Nos llega, cuando
De verdad amamos.
Si cumplimos un deseo,
Con él, el cielo alcanzaremos,
Con nuestro amor subiremos
Hasta las nubes, y más allá,
Como pájaros volaremos,
Unidos, alma con alma,
Porque cuando las almas
Unidas están por el amor,
Muy alto volarán,
Y unidas siempre estarán,
Para amarse de verdad.
Volar, juntas, para siempre,
Y gozar la pasión,
Que para siempre tendrán.


viernes, 1 de octubre de 2010

Despiértame



Despiértame, porque desde que te fuiste
Estoy muerta, me dejaste muerta.
Mi cuerpo está muerto desde que no lo acaricias
Con tus manos, ni lo rozas con tus dedos
Por todos sus rincones, hasta llegar
Al último de ellos.

Despiértame, porque desde que me dejaste
No te he podido olvidar, tu rostro no se borra de mi mente.
Mi mente solo ve tus bellos ojos verdes,
Tu rostro hermoso, tus labios abiertos
Abiertos para darme un beso,
Acércate a los míos
Y dámelo.

Despiértame, porque desde que me olvidaste
Yo no he podido hacerlo,
No he podido arrancarte de mi corazón.
Mi corazón no puede deshacerse de ti,
Porque le has hecho mucho daño,
Lo has partido en mil pedazos,
Ya no puedes arreglarlo, no tiene consuelo,
Mi alma llora tu ausencia,
Ven, y consuela mi alma,
Porque si no vienes,
Mi alma morirá,
Ven, y sálvala.

Despiértame, por favor, despiértame,
Mi amor, te daré lo que tú quieras,
Te daré todo mi amor,
El amor que nunca has soñado,
Te lo daré…,
Si vuelves, y me despiertas,
Si vuelves, y me das tu amor,
Te compensaré con el mío,
Y seremos tan felices,
Que nadie será tan feliz.
Como nosotros seremos
Cariño mío.