domingo, 25 de noviembre de 2012

Ellos, los hombres



 


Ellos, los hombres,
No saben lo que quieren,
Ni aprecian lo que tienen,
Solo saben mirar por ellos
Sin tener en cuenta a la pareja,
Son egoístas y machistas,
A las mujeres, las ven bellas,
Pero solo ven la belleza de fuera,
La que estos hombres miran
Y examinan…,
Con lascivia, y con sus ojos
Las acarician…,
De arriba abajo, y de abajo arriba,
Con sus miradas las desnudan,
Cual si fueran posesión suya,
Pero saben, que nunca suyas serán,
Que nunca las poseerán,
Porque las mujeres,
Conocen estas miradas,
Y saben que con ellas las atacan,
Y nunca se dejarán
Por estos hombres tocar,
Porque saben reconocer en ellos,
Que sus juguetes serán
Y que, pronto sucederá,
Que como a un juguete usado,
Las tirarán…,
Pero claro, todo esto pasará,
Después de las miradas llegarán
Pronto o tarde, a conocerse,
Y así, su vida, compartirán.
¡Ya son dueños del juguete!,
Sus juguetes les servirán
Para no hacer nada en la vida,
Pues ellos se encargarán
De todo solucionar,
Y estos hombres egoístas,
No se lo agradecerán,
Porque para ellos serán
Obligaciones de estas mujeres,
Esos bellos seres…,
A las que un día quisieron,
Y que cuando de ellas se cansaron,
Se ha dicho antes, y la frase se repite,
Pues a la basura tiraron.

Perdonad los hombres en general,
Esta parodia tan singular,
Que ofender no quiere,
Pues ya sabemos,
Que todos sois buenos,
Y que con esas mujeres,
Compartís vuestras vidas,
Para hacerlas felices
Cada día...,
Y hasta el fin de vuestros destinos.
Pero esta salvedad
No es para todos en su totalidad,
Porque algunos hay que menospreciar
Por su comportamiento,
Con las mujeres en general.




lunes, 19 de noviembre de 2012

Nosotras las mujeres



Nosotras las mujeres nos enamoramos
De los hombres que nos hieren,
No queremos el buen amor
De los hombres que no dañan nuestro corazón,
Pues casi nunca sabemos…,
Lo que queremos.
Si un hombre nos hace daño
Lo queremos…,
Sin saber si lo merece,
Porque en nuestra locura
Nunca tenemos la cordura
De conocer el cariño
Del que ese hombre carece,
Y aunque lo sabemos
Nuestro amor…,
Le devolvemos con creces.
Si el corazón le prestamos,
Él nunca nos lo devuelve,
Porque quiere que le demos
El corazón para siempre,
Y nosotras, pobres ilusas,
Confiando en él seguimos,
Y todo le consentimos,
Todo, hasta la falta de cariño.
Si no es tierno, lo queremos,
Si no es cariñoso, también,
Y toda la vida seguimos
Compartiéndola con él.
Aunque no se lo merezca,
Pues nunca nos damos cuenta
Que la vida estamos perdiendo,
Que el tiempo está corriendo,
Que lo perdemos…,
Que la vida se nos va,
Y que junto a ese hombre ingrato,
Nunca…, nunca,
Podremos volver atrás.
Pero si atrás volvemos,
Si podemos recuperar,
El tiempo que con él perdimos,
Lo que debemos pensar
Es que a otro hombre,
Que no se parezca a él,
A éste que no nos quiso
Es al que debemos querer,
Debemos aceptar sus mimos,
Sus besos, sus zalamerías,
Su vida y su alegría,
Con él volveremos a la vida,
Volveremos a ser felices,
No lloraremos jamás,
Puesto que él sabrá
Tratarnos con gran amor,
Y así comprenderemos,
Y pronto a llegar sabremos,
Que un amor es de los dos,
Porque el amor que no besa,
Que no acaricia ni cuida,
Es que no aprecia tu belleza,
Ni por dentro ni por fuera,
Por dentro porque no alcanza,
Por fuera porque no mira,
Y al final de nuestra vida,
Tan solo recordaremos,
El amor que nos dio
El que más tarde…,
A nuestra vida llegó,

Y esta será la experiencia,
Para nunca más querer,
Al que no tiene conciencia,
 



sábado, 10 de noviembre de 2012

La traición





La traición en el amor,
Es dolor, es amargura,
Para la persona que ama,
Pero no para la que traiciona,
Porque su alma no es pura,
Y no sabe comprender
Lo hermoso que es el amor,
Y nunca podrá saber,
Por su falta de sinceridad,
Por ser falso y egoísta,
Ególatra e infiel,
Lo que es el amor de verdad,
Porque no sabe amar,
Y nunca podrá saber,
Lo que con el amor se siente,
Y si por la vida así va,
Nunca, nunca, en su camino
Encontrará la felicidad.




domingo, 4 de noviembre de 2012

El barco Pirata





Un barco pirata
Ha encallado en mi ciudad,
Tanto le ha gustado
Que al verla desde el mar
Levó su ancla
Para llegar a la orilla,
Porque en ella se quería quedar.

Es tan bonito y majestuoso
Que todos lo quieren ver,
El pueblo acude en tropel
Acercándose para fotografiarse
Junto a él…,
Y guardar la foto
Para la posteridad.
Nuestra ciudad
Vuelve a ser famosa
Por el barco pirata
Que en ella se quiere quedar,
La noticia ha recorrido
Todo el mundo…,
Más que si un platillo volante
Hubiese amerizado en el mar.

El barco pirata,
¿Se irá o no se irá?,
Esa incógnita tendremos
Que superar…,
Hasta que sepamos
Lo que va a pasar,
Mientras continuaremos
Contemplándolo hasta
Que nuestras playas
Abandone a su pesar,
Porque como hemos dicho
Al ver nuestra ciudad desde el mar
Le gustó tanto…,
Que en ella se ha querido quedar.